La expoliación de la clase media, cae el consumo y sube el endeudamiento familiar
Debido al deterioro del poder adquisitivo, muchos argentinos tuvieron que restringir gastos en servicios, alimentos, esparcimiento, salud, entre otros “gustos” que antes se permitían. Según un informe de la consultora Scentia, el consumo general cayó un 12,5% en junio de 2024 en comparación con el mismo mes del año anterior, con una baja acumulada del 8,5% en el primer semestre del año. A la par de esta caída, la deuda de las familias no para de crecer. Según un estudio de julio realizado por el Centro de Almaceneros y Comerciantes Minoristas de Córdoba, el 93% de los encuestados afirmó estar endeudado.
Las principales razones para el uso de tarjetas de crédito incluyen la compra de alimentos (54%), carga de combustible (16%), pago de impuestos y servicios (12%), y compra de indumentaria (11%). La velocidad de este endeudamiento casi que duplica a la del año pasado. A estas alturas, no hay ninguna duda que la actual debacle (y perspectiva de desastre a mediano plazo) es el resultado directo de la gestión “libertaria” de Milei, y no de ninguna herencia previa.
La caída de todos los indicadores económicos en tan poco tiempo se debe a una estrategia neoliberal y neocolonial, con un enfoque dogmático por parte del presidente que no se condice del todo con la práctica (más controles mal aplicados y más impuestos). Además, carece de un plan de contingencia social, por lo que, como salida, terminará optando por la represión.
La rentabilidad es desmedida entre los oligopolios y monopolios (Incremento de su rentabilidad en el primer trimestre de 2024 en comparación con el mismo período de 2023)
- Aeropuertos Argentina 2000: Aumentó al 80,1% en 2024 frente al 2,2% en 2023.
- Metrogas: Aumentó al 74,3%, comparado con el 2,3% del año anterior.
- Pampa Energía: 68,3% en 2024, subiendo desde el 33,5% en 2023.
- Aluar: 52,1% en 2024 respecto al 5,0% del 2023.
- Richmond: Pasó del 1,5% en 2023 al 51,2% en 2024.
- Mirgor: Del 5,5% en 2023 a 51,2% en 2024.
- Arcor: Subió del 15,5% en 2023 al 50,2% en 2024.
- Techint: Del 30,4% en 2023 al 49,6% en 2024.
- Loma Negra: Del 14% en 2023 al 45,8% en 2024.
- Banco Macro: Del 4,3% en 2023 a 44,9% en 2024.
Caída del consumo popular (Caída interanual de junio del 2024)
- General: -12,5% de caída, siendo un -17,2% en el interior y un -5,1% en el AMBA.
- Bebidas alcohólicas: -19,6%
- Bebidas sin alcohol: -16,2%
- Limpieza de ropa y hogar: -12,4%
- Desayuno y merienda: -12,1%
- Higiene y cosmética: -11,3%
- Impulsivos (golosinas y productos localizados cerca de la caja): -21%
- Alimentos: -7,9%
- Perecederos: -5,4%
- Alquileres: un alquiler (de lo más barato) que en febrero era de 32.000 pesos, hoy está en 120.000 pesos con una previsión para agosto de 170.000
- Carne vacuna: -16,7%, el peor registro en 13 años y llegando a un consumo anual per cápita de 44,7 kg, el nivel más bajo en 19 años.
El gobierno nacional se encuentra en un punto en el que no sabe cómo avanzar sin provocar un colapso total. El control del dólar oficial, fijado en un aumento del 2% mensual, continúa encareciendo al país en términos de moneda extranjera, paralizando la actividad económica y aumentando las presiones para una nueva devaluación.
Caputo comenzó a llevarse a Londres nuestras reservas de oro como garantía para que le presten unos pocos dólares. Recordemos que Londres ya se quedó con el oro de Libia y de Venezuela violando toda norma internacional habida y por haber. A esto se suma, en la etapa que viene, un calendario de vencimientos de deuda impagable, que probablemente nos lleve a un nuevo default.
El problema era y sigue siendo la falta de DÓLARES GENUINOS
Ya desde el gobierno anterior, venimos planteando que el principal problema de nuestra economía no es el déficit fiscal ni la emisión monetaria, sino la falta de divisas, debido a la economía bimonetaria y al endeudamiento improductivo.
Esto es algo que Cristina Kirchner ha señalado repetidamente, y tiene razón. La fantasía de la emisión cero y la contracción monetaria extrema son soluciones simplistas que no abordan las complejidades de la economía real y no resolverán, ni siquiera, la inflación. Incluso si se logra un déficit y emisión cero, los precios volverán a dispararse cuando “el mercado” exija una nueva devaluación.
Argentina tiene que, en primer lugar, acumular reservas genuinas generadas en nuestro propio territorio, que hoy son captadas por un puñado de monopolios, especuladores y organismos internacionales de crédito; y en segundo lugar, atraer inversiones productivas de nuestros aliados naturales que son, por ejemplo, los países del BRICS, con China Socialista a la cabeza. Esto sin necesidad de ninguna recesión, ni cierre de industrias, ni despidos, ni tarifazos como pretende el gobierno. Los números de Milei hasta ahora son solo comparables con calamidades de la magnitud de una pandemia o una guerra, con caídas de dos dígitos en la mayoría de los sectores en comparación con el año anterior.
Actualmente en nuestro país se vive un vertiginoso deterioro de las condiciones de vida de nuestro pueblo: caída de salarios y jubilaciones, caída abrupta del consumo, aumento desmedido y desregulado de los servicios, endeudamiento de las familias, despidos y suspensiones, cierres de fábricas, crecimiento de la desigualdad, etc. Que por el momento no se ha topado con altos niveles de resistencia. Sin reservas ni nuevos desembolsos del FMI, el gobierno se hunde en una nueva crisis de deuda.
¿Qué debemos hacer?
En primer lugar, tomar conciencia de que hay que hacer algo, la idea de que por si sola la situación cambiará las cosas es rotundamente falsa; la organización y la acumulación es el único camino para una salida ordenada de esta situación.
En el sector del trabajo, en un barrio, en una escuela, en un club social o donde sea. Sólo es posible acumular en la lucha, y las luchas se desarrollan de menor a mayor.
El problema no está en el pueblo sino en quienes deberían estar al frente de esas reivindicaciones. Abundan las condiciones objetivas para la conflictividad, falta desplegar el factor conciencia. Solo con lucha y organización podremos construir un horizonte diferente para las mayorías.
A nivel municipal debemos estar preparados para cualquier escenario, y si bien sabemos perfectamente que la política auténtica no pasa por lo electoral, no menos cierto es que el instrumento electoral existe; y la izquierda que se jacte de disputar poder (y no ser un mero florero del sistema) no puede ignorar que el instrumento electoral es necesario.
Por eso los Comunistas Villeguenses, hemos lanzado la campaña de afiliación 2024, ¡Afíliate!